La Nación
El candidato de izquierda llamó a desconocer la decisión judicial; presentará un plan de acción
CIUDAD DE MEXICO.- El candidato de la izquierda Andrés Manuel López Obrador, convencido de que la presidencia de México no será suya, advirtió ayer que creará un gobierno paralelo y les pidió a los mexicanos que no reconocieran la victoria del oficialista Felipe Calderón.
El anuncio del ex alcalde de la Ciudad de México llegó un día después de que el Tribunal Federal Electoral (TFE) confirmara como válida la reñida victoria del candidato oficialista, Felipe Calderón, en las elecciones presidenciales del 2 de julio pasado. Pese al alto voltaje de la advertencia, la presidencia de México desestimó el anuncio del candidato opositor.
"Entendemos que se trata de una expresión política de carácter simbólico que no tiene ninguna vigencia en la conducción misma del Estado", declaró el vocero presidencial Rubén Aguilar.
La ventaja de Calderón, del oficialista Partido de Acción Nacional (PAN), por 240.000 votos (0,58% de los sufragios) en las elecciones fue confirmada anteayer por el TFE; los siete magistrados de esa corte aún no lo declararon presidente electo, pero tienen una semana para hacerlo o anular los comicios.
López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien impugnó las elecciones de julio pasado alegando fraude, propuso anteanoche a sus seguidores que desconocieran al candidato oficialista como presidente y formar una administración propia con "un jefe de gobierno en resistencia".
Aunque todavía falta que el Tribunal califique la validez de los comicios y en su caso declare un presidente electo, López Obrador consideró que el órgano judicial ya abrió "el camino a un usurpador que pretende ocupar la presidencia de la república".
El candidato del PRD acusó a los magistrados de adoptar "una decisión política y no jurídica" y de haberse sometido a "un grupo de privilegiados y extremistas de derecha". El fallo "representa no sólo una vergüenza a la historia nacional, sino una violación al orden constitucional y un verdadero golpe de Estado", dijo.
López Obrador presentó un plan de acción para que sus seguidores lo discutan y en su caso lo aprueben durante una convención nacional democrática, el 16 de septiembre, que incluye desconocer a Calderón como mandatario. El ex alcalde denunció anteayer en el Zócalo de la capital mexicana la inminente llegada al poder de un "presidente ilegítimo".
La propuesta de López Obrador es que la convención democrática nombre un "órgano de gobierno" que tomaría posesión el día de la investidura presidencial, en diciembre.
Aunque su partido carece de suficientes escaños en el Congreso para bloquear cualquier ley, López Obrador puede movilizar a millones de simpatizantes para obligar a su rival conservador a adoptar su agenda de izquierda o forzarlo a reprimirlo y convertirlo en un mártir.
Por su parte, en un duro editorial, The New York Times sugirió ayer a López Obrador que "ponga fin a sus protestas" y reconozca el fallo de las autoridades electorales mexicanas.
Agencias ANSA, AFP y EFE