La Opinión. Los Angeles
WASHINGTON, D.C. (EFE).— Durante los últimos siete años el flujo migratorio en Estados Unidos ha sido el más elevado de su historia, con cerca de 10.3 millones de nuevos inmigrantes desde 2000, de los cuales más de la mitad son indocumentados, reveló ayer un estudio.
El informe, realizado por el Centro de Estudios de Inmigración (CIS), muestra cómo el número de inmigrantes que residen en Estados Unidos, tanto con documentos legales como indocumentados, asciende a 37.9 millones en 2007 y supera todas las marcas hasta ahora conocidas.
"Los que apoyan la legalización masiva de los inmigrantes han mantenido durante mucho tiempo que la inmigración está disminuyendo y que las cifras no son tan altas como solían ser en los 90. Eso no es verdad", dijo Mark Krikoriam, director ejecutivo del CIS.
El análisis, que utiliza como base los datos dados a conocer por la Oficina del Censo en marzo de este año, apuntó a que uno de cada ocho residentes en el país es inmigrante, lo cual supone la cifra más elevada de los últimos 80 años.
De entre los nuevos residentes, cerca de 5.6 millones son indocumentados.
Para determinar el número de inmigrantes que residen de manera ilegal en el país, el informe analiza una serie de características para establecer la probabilidad de que una persona sea un inmigrante indocumentado.
La estimación se calcula en relación con cuestiones tales como el origen, la profesión o el nivel educativo de cada persona.
"Un veterano de guerra es casi imposible que sea un inmigrante indocumentado, mientras que un mexicano que no ha terminado los estudios secundarios y que lleva en el país un par de años tiene muchas probabilidades de serlo", explicó Krikoriam.
"Se trata del mismo método con el que calculan el número de inmigrantes ilegales en el censo o en el Departamento de Seguridad Interna", añadió.
Krikoriam consideró que las cifras recogidas apuntan a que "la inmigración no va a dejar de producirse sin más, y nosotros tenemos que elegir entre dejar que eso ocurra o hacer algo para que se reduzca".
El director ejecutivo del CIS, un centro de estudios de tendencia antiinmigrante, consideró que a pesar del aumento de la seguridad fronteriza la solución ante la enorme cantidad de inmigrantes que residen de manera ilegal en Estados Unidos necesita de una respuesta en el "interior del país".
"Hay que tomar medidas tales como hacer más complicado conseguir un trabajo, abrir una cuenta, alquilar una casa", especificó Krikoriam.
En su opinión, el aumento de la seguridad fronteriza "sólo tiene efecto sobre las personas que van a venir, que a base de intentarlo pueden llegar a conseguirlo".
"Las medidas que se han tomado en las fronteras no tienen ningún impacto en los que ya están aquí. Cerca de un tercio de los inmigrantes ilegales entraron de manera legal y después se quedaron", aseguró el director ejecutivo de este centro antiinmigrante.
El estudio mantiene que la llegada de los cerca de 1.6 millones de inmigrantes que EU acoge cada año, tiene un "impacto muy significativo en muchas áreas de la vida de los estadounidenses".
"[Su situación] crea enormes desafíos para las escuelas, el sistema sanitario y las infraestructuras físicas del país", dice el estudio en sus conclusiones.
Según Krikoriam, "las familias de inmigrantes suelen pagar pocos impuestos por sus reducidos ingresos y, sin embargo, el hecho de que residan en el país implica enormes gastos para las comunidades en educación, en salud y otros servicios".
El estudio muestra cómo en el 78% de los hogares inmigrantes existe al menos un trabajador que se beneficia de al menos un programa de bienestar.
El objetivo del análisis, firmado por Steven A. Camarota, del CIS, es el de aportar datos precisos al debate migratorio en EU, que sigue vigente tras el fracaso de la reforma integral de inmigración y que será uno de los temas clave en las próximas elecciones.
"El debate migratorio no cita los números reales, es algo que se basa en cuestiones de tipo sentimental", dijo Krikoriam.
"Sin importar lo que opines sobre la inmigración ilegal, hacen falta las mejores cifras posibles para comprender la naturaleza y la importancia real de este fenómeno", concluyó.