¿Compañías puntocom? ¿Sector inmobiliario? ¿Petróleo? ¿Maíz?, ya tuvieron su momento de explosión. Nos pusimos la camiseta y perdimos. Algo sobre lo que podemos tener absoluta certeza en la economía mundial actual es que siempre se forma una burbuja de inversión en algún lugar. Si usted llega lo bastante pronto, puede ganar una fortuna durante el boom.
Ahora que los precios de las propiedades están desplomándose más rápido que una tienda de campaña en un día tormentoso y que el tren del petróleo y las materias primas ya se fue, ¿en dónde deben buscar los inversores la próxima gran cosa? Hay cinco áreas que vale la pena tomar en cuenta: la Vieja Europa, los automóviles, la negociación de acciones, el dólar y las islas privadas.
Cualquiera que haya seguido los mercados financieros en los últimos 20 años habrá notado un común denominador: cada mes tiene su propio sabor. Los inversores detectan una tendencia y todo el mundo entra hasta que las valuaciones se salen de proporción; luego todo se colapsa y acaba en quiebras y demandas.
Al comienzo de la década se produjo una burbuja en las puntocom. Más recientemente presenciamos lo mismo en el sector inmobiliario -impulsado por la disponibilidad de hipotecas de alto riesgo- así como en el petróleo, los alimentos y las materias primas.
Ha habido un frenesí de compras en las economías BRIC: Brasil, Rusia, India y China. Y han surgido burbujas en los instrumentos financieros, como las obligaciones con garantía de un fondo de deuda (CDO) que ayudaron a desencadenar la crisis “subprime”. A lo largo del trayecto tenemos algunas burbujas menores en las cosas compradas por las personas que ganaron dinero con las otras burbujas. Basta con ver cómo han subido los precios de las obras de arte o los equipos de la Liga Premier inglesa.
Verdad elemental
Naturalmente, las burbujas nunca son enteramente absurdas. Un boom siempre tiene un sustento en la realidad. La Internet fue una nueva tecnología importante y, con el paso del tiempo, algunas empresas ganarían mucho dinero con ella. El boom de las puntocom tomó esa verdad elemental y la exageró tremendamente.
Igualmente, sumar a China y a la India al mundo desarrollado significará que las materias primas se encarecerán. Y, no obstante, el boom de los recursos naturales tomó ese gráfico de tendencia ascendente y dio por sentado que llegaría directamente al cielo.
Así que ¿en dónde se encuentran las próximas burbujas? Es necesario encontrar algo en donde hay razones sólidas para esperar un buen crecimiento, pero que también puede convertirse en una megatendencia una vez que los astutos ejecutivos de la banca de inversiones entran en acción.
He aquí algunos lugares donde empezar a mirar, tomando en cuenta que las burbujas son de cinco tipos básicos: lugares, sectores, financiación, monedas y lujo.
FIA derrota a BRIC
Primero, el lugar: la Vieja Europa. Olvídense de los países BRIC. La próxima década le pertenecerá a los países FIA: Francia, Italia y Alemania. Les hemos prestado tan poca atención durante tanto tiempo que corremos el riesgo de olvidar que los tres han pertenecido al grupo de las sociedades más ricas del mundo por más de 1.000 años.
Conforme las clases medias de China y la India crecen, gastarán dinero en el tipo de productos caros, de diseño y ricos en historia en los que los países FIA son tan buenos. Tras la crisis del crédito, su combinación de un crecimiento estable encabezado por las exportaciones y autofinanciable parecerá más atractivo que los modelos de Estados Unidos y el Reino Unido, impulsados por la deuda.
Después, el sector: los automóviles. Ha pasado casi un siglo desde que presenciamos por última vez un frenesí por los automóviles, lo que sugiere que es momento de que se repita. Luego de que los precios del crudo alcanzaron niveles récord, algunas de las personas más ricas del mundo empezaron a estudiar con más seriedad fabricar automóviles eléctricos baratos que no contaminen. Si lo logran, cientos de millones de vehículos serán reemplazados en unos años. Piensen en la fortuna que las discográficas ganaron cuando reemplazaron nuestros discos de vinilo con discos compactos, y luego multiplíquenla por 10.000 o más. Suena como un boom.
Negociación de acciones
¿Qué hay de la burbuja financiera? Será en la negociación de acciones. Ha pasado mucho tiempo desde que estuvo de moda; ni siquiera quedan muchas empresas que se dediquen a ello. La mayoría son divisiones de bancos de inversión. Y, no obstante, hay miles de empresas con balances destrozados por la crisis crediticia. Necesitan asesores que tengan una buena relación con los inversores y puedan reunir dinero para sus clientes vendiendo acciones.
Eso es lo que solían hacer las casas de bolsa. Si es listo, cierre ese fondo de cobertura y dedíquese al corretaje de acciones. En unos cuantos años UBS AG pagará una fortuna para comprarle la firma.
La burbuja de las monedas involucrará al dólar. Los mercados lo han desdeñado por mucho tiempo, y para el año entrante bien podría resultar que sea Estados Unidos el que tiene la economía más fuerte del mundo. La debilidad del dólar desencadenará un boom de exportaciones. Muy pronto describiremos a Estados Unidos como la nueva Alemania: una economía industrial dedicada a la exportación, limitada tan solo por la renuencia de sus consumidores a gastar.
¿Y cómo exhibirán los megarricos la nueva fortuna que ganaron con esas burbujas? Olvídense de colgar una obra de Matisse en la pared. Eso es demasiado vulgar. Con respecto a los equipos de fútbol, esa es otra burbuja que estallará. Los nuevos multimillonarios de los países FIA de los sectores automovilístico y financiero valorarán la privacidad y la discreción por sobre todo lo demás.
No hay mejor manera de hacerlo que comprando parte de un país. Apodérese de una isla escocesa aunque la azoten los vientos tempestuosos del mar del Norte, y podrá venderla por una fortuna dentro de unos años. Solo recuerde salirse del mercado antes de que estalle la burbuja.