Por Daniel Rodríguez Herrera
Instituto Juan de Mariana
El poder no puede crear derechos. Estos pertenecen a todo ser humano por el hecho de serlo y son, como decía la Declaración de Independencia, inalienables.
El poder lo que puede hacer es o bien reconocerlos y protegerlos, o bien violarlos, que es lo que ha hecho casi siempre desde que el mundo es mundo. Son los derechos a la vida, a la libertad, a la propiedad; esos que se llaman "negativos" porque para respetarlos basta con no atacar a los demás.