Por Antonella Salomon Marty
"La única forma de cambiar el curso de la sociedad será cambiando las ideas. Primero debes llegar hasta los intelectuales, profesores y escritores con un argumento razonado. Su influencia sobre la sociedad será la que prevalezca, los políticos la seguirán" expresaba F. A. Hayek, quien siempre comprendió la importancia de la actividad intelectual en el mundo de las ideas.
En parte, fueron presentados esta semana los datos de la nueva edición del “2013 Global Go To Think Tank Index”, elaborado por el Dr. James McGann, quien es director de programas en la Universidad de Pennsylvania, uno de los centros mas fuertes en lo que respecta a investigación de políticas publicas. Este novedoso índice engloba más de 1.647 distinguidas instituciones de todo el mundo, con el propósito de hacer hincapié en destacar los trabajos y logros más trascendentes realizados en el seno de cada uno de ellos.
Los resultados del índice en América Latina
La institución que encabeza la categoría Top Think Tanks de América Latina es nuevamente la Fundación Getulio Vargas (Brasil), seguida por el prestigioso centro de pensamiento CEDICE de Venezuela. Dentro de esta categoría se encuentran también la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (#16), Libertad y Desarrollo de Chile (#27), el IEEP de Ecuador (#28) y Fundación Libertad ubicada en el puesto numero 31 -institución argentina que ha cumplido sus 25 años en la defensa de las ideas de la libertad.
Nuevamente, resultó ser CEDICE -reconocido centro de pensamiento que se destaca por su trabajo significativo en defensa de la libertad, la propiedad privada y los derechos individuales, la cual por cierto, cumplirá sus treinta años de vida institucional el próximo abril- una de las más destacadas en el presente estudio. CEDICE observa un notable crecimiento y trayectoria a lo largo de estos años, considerando que en la edición 2011 del índice de James McGann, se situaba en la novena posición de la misma categoría, y hoy es la institución que lo encabeza.
Los resultados del índice en Estados Unidos y el resto del mundo
Entre los think tanks más destacados de los Estados Unidos de América y que a su vez promocionan fuertemente el ideario del libre mercado y los derechos individuales, se cuenta a The Heritage Foundation en el octavo puesto, The Cato Institute (noveno puesto), FEE (puesto número 44) y The Independent Institute (puesto número 54).
El índice, por cierto, involucra el análisis de centros con la más diversa orientación. En la categoría 150 Top Think Tank -Global, Brookings sumó la mayor cantidad de votos, mientras que en la misma categoría se encuentran mencionadas instituciones tales como Fraser (#26), y nuevamente Fundación Libertad (#100) y los institutos chilenos CEP (#92) y Libertad y Desarrollo (97). Asimismo, entre los nuevos centros de pensamiento que ingresaron en este índice, se encuentra la Fundación Libertad y Progreso de Argentina.
En este sentido debemos comprender la importancia de la existencia de los centros de pensamiento, también denominados “Think Tanks”. F. A. Hayek depositaba su confianza en ellos, ya que aseguraba que éstos serían el mejor camino para la difusión de las ideas y los principios de la libertad. Fue así que el economista austríaco colaboró académicamente con el IEA (Instituto de Asuntos Económicos). Antony Fisher, un hombre de negocios que deseaba hacer algo por cambiar el destino de Inglaterra, le consultó a Hayek sobre cuál era la mejor forma de lograr el cambio que él tanto deseaba. Así, Hayek lo persuadió para que tome el camino intelectual, en lugar de incursionar en el gastado ámbito político.
Los resultados fueron grandiosos. En 1955 fue fundado por Antony Fisher, uno de los primeros Think Tanks liberales del mundo: el IEA. Una vez fundada la institución, se dirigió a Fisher en una carta, expresando lo siguiente: "Ha llegado el momento y casi podríamos decir la necesidad de extender una red de instituciones como el IEA. El futuro de la civilización depende de la manera en que logremos atraer a la mayor parte de las próximas generaciones de intelectuales a lo largo del mundo (...) Creo que estaba en lo cierto cuando argumenté hace treinta años que sólo podremos derrotar el auge del socialismo si conseguimos persuadir a los creadores de opinión y a los intelectuales”.
De este modo, los intelectuales serán los encargados de acabar con los esquemas estatistas que dominan y atormentan la región. El campo de batalla debe ser el de las ideas de la libertad a pesar de que en diversas ocasiones tengamos que nadar contra la corriente. Es menester recordar el poder de las ideas y que éstas “tienen consecuencias”.