Por Andrea Rondón
Con ocasión a las consecuencias esperadas –pero igualmente dolorosas- de las medidas económicas adoptadas desde hace más de una década, han surgido distintas formas de defenderse del control de cambio y de la hiperinflación que nos afecta desde hace años.
Para algunos el bitcoin es una forma de protegerse ante el envilecimiento del bolívar. Para otros, la llamada minería se ha convertido en su ingreso principal, porque con ella se puede obtener un promedio de hasta 500 dólares al mes, lo que para ser honestos, es una verdadera alternativa en un país en el que el salario mínimo está cerca de los 10 dólares mensuales.