Por Álvaro Vargas Llosa
Ante la humillación que significa la derrota del Partido de los Trabajadores a manos del líder de un partido que tenía un solo escaño en el Congreso, figura marginal contra el cual casi el mundo entero alertó por sus dichos misóginos, homofóbicos y militaristas del pasado, la izquierda latinoamericana tiene dos opciones.
Una es cobijarse bajo el manto protector de las excusas y pretextos, es decir hablar de Bolsonaro como si se tratara de una catástrofe natural semejante al deslizamiento de tierra que arrasa un pueblo porque sí (“es el auge de la extrema derecha en todo el mundo, es el retorno del fascismo, es un epifenómeno de Trump”); la otra es asumir la principalísima responsabilidad que le cabe a la izquierda, y especialmente a la encarnada por el Partido de los Trabajadores y Lula da Silva, en haber llevado a los brasileños al estado de ánimo, a la condición psicológica, que convirtió a Bolsonaro en una opción de triunfo. No hablo del Bolsonaro que gobernará, pues no sabemos todavía si desmentirá los temores preventivos con una gestión encuadrada en los límites republicanos o si desbordará el marco democrático (lo que, por lo demás, no sería nada fácil en el Brasil de hoy, con algunas instituciones fortalecidas e incluso envalentonadas tras la crisis de los últimos años y una ciudadanía muy rebelde). Me refiero al Bolsonaro de la campaña y de los antecedentes preocupantes.
Continuar leyendo "La izquierda ante Bolsonaro" »