Por Luis Torras
Instituto Juan de Mariana
“[…] si baja el dinero del valor legal, suben todas las mercancías sin remedio, a la misma proporción que abajaron la moneda y todo sale a una cuenta" (Juan de Mariana, Tratado y discurso sobre la moneda de vellón, 1609, 400 años antes de que la Reserva Federal ponga en marcha las políticas del quantitative easing)
Si hay una cuestión central en la ciencia económica, es la de la moneda y la teoría monetaria. Se trata de un asunto que viene de antiguo, hoy, como antaño, crucial en la defensa de un orden social liberal. Los excesos en la oferta monetaria se sitúan en el origen de prácticamente la totalidad de las crisis financieras desde la Segunda Guerra Mundial, y son la base del patrón burbujeante, no ya cíclico, que caracteriza el grueso de las economías avanzas. En efecto, en paralelo al auge y relevancia de los bancos centrales se ha ido institucionalizando en todos los ámbitos la idea de inflación hasta el punto de desnaturalizar la propia idea de capitalismo. Se trata de una cuestión que viene de muy antiguo. Cicerón en una de sus filípicas recuerda: “El dinero sin medida enerva los nervios de la guerra”.